Cuando llega el calor de la primavera y buscamos un lugar para unas minivacaciones, un descanso para el fin de semana o unos completos y felices días de descanso, la costa atlántica argentina ofrece una serie de alternativas, todas con playas, mar, sol, bosques y la posibilidad de practicar deportes, disfrutar de la mejor gastronomía, disfrutar de los más diversos espectáculos y alojarse en los mejores hoteles de la costa atlántica.
¿Cuáles son las alternativas?
Las opciones de disfrute de vacaciones costeras o playeras durante la primavera son tan amplias y diversas que se ajustarán a las necesidades y preferencias del turista, siendo algunas de ellas.
San Bernardo: es una linda y compacta ciudad costera de argentina donde los jóvenes se suelen dar cita para disfrutar plenamente de la vida postplaya, con fines de romance o diversión.
Sus playas son lugar ideal tanto para escuchar bandas como para recibir el bronceado del Astro Rey mientras nos vamos dando vuelta al compás de una lectura o el mp3 ya desde el inicio de la primavera.
San Clemente: esta hermosa localidad familiar y tranquila de la costa atlántica argentina muestra todo su encanto y la amplitud de sus playas durante todo el año, y es una de las más turísticas de la costa porque ofrece alternativas como el avistamiento de aves en Punta Rasa o las Termas Marinas de San Clemente que funcionan todo el año y son el primer complejo en la costa atlántica argentina destinado a este tipo de termalidad.
Las Grutas: si se viaja en primavera cuando el calor comienza o ha llegado a su apogeo, Las Grutas, cerca de San Antonio Oeste, ofrece un hermoso lugar para bañarse, disfrutar de la playa con un buen protector y hasta practicar buceo en virtud de sus aguas excepcionalmente cálidas y de tono verdoso.
Pinamar: para muchos las pinamarenses son las mejores playas de Argentina, y esta ciudad balnearia es conocida por sus lindas edificaciones, bosques sabiamente preservados y disposición arquitectónica general.
El tipo de turista que visita Pinamar durante las vacaciones acredita cierto poder adquisitivo y la voluntad de disfrutar del mejor descanso con la mayor comodidad en una Pinamar en la que el sol primaveral que empieza a quemar invita como canto de sirena a los viajeros a disfrutar de la playa y los deportes.
Cariló: una ciudad también hermosa con selectos hoteles y hasta la posibilidad de jugar al golf a unos minutos de la playa es la hermosa Cariló.
De estilo entre moderno y con resabios de cuentos de hadas, en los balnearios de Cariló y toda la ciudad se procura una relación armónica con el entorno natural y un disfrute en familia que incluya playa y actividades.
Mar de las Pampas: una ciudad tranquila donde no se puede correr ni producir ruidos ni contaminación alguna es Mar de las Pampas, la slow city de la costa atlántica argentina que en primavera ya muestra toda su belleza con bosques frondosos y una paz única en el mundo que los turistas han aprendido a valorar para reencontrar la paz junto a la familia.
Villa Gessell: un lugar que los jóvenes prefieren desde hace décadas, donde la música juvenil de las nuevas generaciones invaden las playas y muchachos y muchachas bailan al son de los diferentes ritmos de moda anticipando los rituales nocturnos que tienen lugar durante la distensión propia de la época de descanso.
Mar del Plata: las vacaciones marplatenses en la primavera siguen siendo una opción buscada por el turista argentino del interior del país y por muchos extranjeros que procuran disfrutar de la ciudad vacacional de verano por antonomasia de Argentina, epicentro de la vida cultural y donde se puede disfrutar de las más diversas propuestas para amenizar la jornada de relax y descanso garantizando disfrute lejos de las obligaciones.